01-02-06, 16:21
LA pianista puede que haya sido la película de Haneke que más repercusión ha logrado hasta que a Caché la han enterrado en premios. La fama de la pianista le vino entre otras cosas, por la increíble interpretación de Isabelle Huppert, y más tarde por la concesión del nobel de literatura a la autora de la novela en la que se basó la peli, Elfriede Jelinek. Pienso que nadie que haya la peli se haya quedado indiferente, esa peli era un verdadero puñetazo en los morros del espectador.
Creo que ahí ya pueden verse muchas de las constantes de las otras películas de Haneke. Por un lado, la forma de plantear la película: no nos lanza mensajes mascados, no nos ofrece respuestas, sino que más bien nos plantea interrogantes, deja "cabos sueltos" para que sea el espectador el encargado de atarlos. Pero esto no lo hace de una forma cómoda o amable: como espectador, cuando uno ve una película de Haneke, se siente acorralado, acosado, insultado, golpeado. Es difícil quedarse indiferente. Esto también le convierte en un cineasta difícil, no válido para todos los públicos: obliga al espectador a estar en un continuo estado de alerta, la pasividad ante sus películas no nos servirá de nada.
Por otro lado, la violencia. La podemos encontrar de una forma más implícita, como en Código desconocido, o de forma totalmente explícita, como en Funny Games o la pianista. El director austriaco nos destapa la violencia más irracional presente en la vida cotidiana, y para ello se ensaña con sus personajes, a los que suele maltratar sin piedad. Pero no se queda ahí, sino que también nos hace reflexionar sobre lo que supone la violencia para nosotros, sobre la violencia como espectáculo: También es posible, gracias al poder del cine, luchar contra las imágenes que, hoy en día, quieren hacer de la brutalidad un producto consumible, dice el director en una entrevista que daban a la salida del cine. En las pelis de este tío la violencia no se representa de manera estilizada o esteticista, no es un espectáculo: la violencia real es desagradable, cada gota de sangre que veamos en una de sus películas nos va a doler de verdad, nos va a remover la conciencia.
Y así se puede hilvanar con otro de los grandes temas: la cultura audiovisual. Quizás enla pianista sto apenas aparezca, pero en las otras sí que contínuamente somete al espectador a trucos que le hacen cuestionarse lo que realmente sale en la pantalla: a menudo nos muestra las cosas a través de pantallas de televisión, de vídeos, cuando pensamos que estamos viendo algo real la imagen se puede rebobinar... Así, nos damos cuenta de que lo que vemos no es la realidad, sino una representación de la realidad. Así, también la violencia no es real, sino que es un truco cinematográfico. Entonces, es cuando podemos empezar a reflexionar sobre la realidad en la que vivimos... ¿Hemos dejado de lado el mundo real para refugiarnos en la realidad simulada que se encuentra tras la pantalla de la televisión o del ordenador?
Y por último, Europa. creo que todas (o al menos casi todas) sus pelis son coproducciones enlas que participa media europa. En la pianista era curioso ver a los actores en Viena... hablando francés :shock: Quizás código desconocido es la que más profundiza en el tema de europa: qué es, de dónde viene, a dónde va, es un lugar tan moderno y seguro como se nos hace creer o es otra cosa distinta...
Todo esto nos puede llevar a pensar en el espíritu de Bertolt Brecht: el compromiso con la realidad, la demoledora crítica social, los trucos para descolocar al espectador... Lo cual nos hace pensar en el que quizás sea el otro gran director-revolucionario europeo del momento, Lars Von Trier. Curiosamente, mucho de lo que se ha dicho lo comparten los dos directores. Quizás Trier busque reflexiones más abstractas y Haneke sea más directo, pero la verdad es que pienso que ambos tienen mucho en común.
Y dicho lo dicho, disculpen la chapa, pero es lo que tiene estar de exámenes :mrgreen: se le acumula a uno la chatarra en la cabeza y por algún sitio hay que purgarla... Bueno, todo esto para decir que la de Caché me ha gustado mucho, y que recomiendo también las otras (menos el tiempo del lobo que no la he visto).
Y recordar para el que no haya visto antes ninguna otra que no es un cine fácil, que mejor que no veais pelis de estas con vuestra abuela si no quereis matarla a disgustos, y que aparte son pelis de pensar bastante. Es para que luego no os lleveis decepciones.
Creo que ahí ya pueden verse muchas de las constantes de las otras películas de Haneke. Por un lado, la forma de plantear la película: no nos lanza mensajes mascados, no nos ofrece respuestas, sino que más bien nos plantea interrogantes, deja "cabos sueltos" para que sea el espectador el encargado de atarlos. Pero esto no lo hace de una forma cómoda o amable: como espectador, cuando uno ve una película de Haneke, se siente acorralado, acosado, insultado, golpeado. Es difícil quedarse indiferente. Esto también le convierte en un cineasta difícil, no válido para todos los públicos: obliga al espectador a estar en un continuo estado de alerta, la pasividad ante sus películas no nos servirá de nada.
Por otro lado, la violencia. La podemos encontrar de una forma más implícita, como en Código desconocido, o de forma totalmente explícita, como en Funny Games o la pianista. El director austriaco nos destapa la violencia más irracional presente en la vida cotidiana, y para ello se ensaña con sus personajes, a los que suele maltratar sin piedad. Pero no se queda ahí, sino que también nos hace reflexionar sobre lo que supone la violencia para nosotros, sobre la violencia como espectáculo: También es posible, gracias al poder del cine, luchar contra las imágenes que, hoy en día, quieren hacer de la brutalidad un producto consumible, dice el director en una entrevista que daban a la salida del cine. En las pelis de este tío la violencia no se representa de manera estilizada o esteticista, no es un espectáculo: la violencia real es desagradable, cada gota de sangre que veamos en una de sus películas nos va a doler de verdad, nos va a remover la conciencia.
Y así se puede hilvanar con otro de los grandes temas: la cultura audiovisual. Quizás enla pianista sto apenas aparezca, pero en las otras sí que contínuamente somete al espectador a trucos que le hacen cuestionarse lo que realmente sale en la pantalla: a menudo nos muestra las cosas a través de pantallas de televisión, de vídeos, cuando pensamos que estamos viendo algo real la imagen se puede rebobinar... Así, nos damos cuenta de que lo que vemos no es la realidad, sino una representación de la realidad. Así, también la violencia no es real, sino que es un truco cinematográfico. Entonces, es cuando podemos empezar a reflexionar sobre la realidad en la que vivimos... ¿Hemos dejado de lado el mundo real para refugiarnos en la realidad simulada que se encuentra tras la pantalla de la televisión o del ordenador?
Y por último, Europa. creo que todas (o al menos casi todas) sus pelis son coproducciones enlas que participa media europa. En la pianista era curioso ver a los actores en Viena... hablando francés :shock: Quizás código desconocido es la que más profundiza en el tema de europa: qué es, de dónde viene, a dónde va, es un lugar tan moderno y seguro como se nos hace creer o es otra cosa distinta...
Todo esto nos puede llevar a pensar en el espíritu de Bertolt Brecht: el compromiso con la realidad, la demoledora crítica social, los trucos para descolocar al espectador... Lo cual nos hace pensar en el que quizás sea el otro gran director-revolucionario europeo del momento, Lars Von Trier. Curiosamente, mucho de lo que se ha dicho lo comparten los dos directores. Quizás Trier busque reflexiones más abstractas y Haneke sea más directo, pero la verdad es que pienso que ambos tienen mucho en común.
Y dicho lo dicho, disculpen la chapa, pero es lo que tiene estar de exámenes :mrgreen: se le acumula a uno la chatarra en la cabeza y por algún sitio hay que purgarla... Bueno, todo esto para decir que la de Caché me ha gustado mucho, y que recomiendo también las otras (menos el tiempo del lobo que no la he visto).
Y recordar para el que no haya visto antes ninguna otra que no es un cine fácil, que mejor que no veais pelis de estas con vuestra abuela si no quereis matarla a disgustos, y que aparte son pelis de pensar bastante. Es para que luego no os lleveis decepciones.