05-03-17, 23:02
El viernes me dio un poquito de pena por Templeton, que les tocó un horario que creo que no les hace justicia... Y The clientele dieron un concierto precioso, una delicia. De todas formas yo el primer día estaba un poco fuera, hubo momentos como con Chorusgirl en los que no me estaba enterando de nada.
El sábado ya estuve con las fuerzas a tope. En el vermut el Matadero se llenó (en la puerta cortaron a ratos el acceso porque el aforo ya estaba completo, y eso que la nave era grande), así que hubo un ambiente bastante majo. Lo único malo es que el sonido del sitio era un poco reguler.
Las Kasettes estuvieron superdivertidas, y Rodney Cromwell creo que espantó a parte de la gente (a mitad del concierto ya había unas calvas enormes entre el público), pero los que nos quedamos yo creo que estábamos casi todos babeando.
Y por la noche me perdí a los dos primeros, pero bueno... los de Witching Waves y The Spook School valió por un festival entero. Vaya dos bolacos.
La mayoría de las pinchadas que vi (que por desgracia no fueron tantas) me parecieron un poquito bajoneras. Eso sí, cuando marché el sábado para la cama estaba empezando Clara Sierra y aquello ya era fiestaza de la buena, temazo tras temazo. Si la cosa siguió en ese plan, seguro que el cierre fue apoteósico.
Por lo demás, como de costumbre es una gozada estar en un festival donde la mayor parte del público está volcada en disfrutar de la música, que todo está hecho con tanto cariño, que puedes echar una charla tranquilamente con cualquiera de cualquiera de los músicos...
Y mención aparte también para el kebab de al lado de la Taboo. Épico.
El sábado ya estuve con las fuerzas a tope. En el vermut el Matadero se llenó (en la puerta cortaron a ratos el acceso porque el aforo ya estaba completo, y eso que la nave era grande), así que hubo un ambiente bastante majo. Lo único malo es que el sonido del sitio era un poco reguler.
Las Kasettes estuvieron superdivertidas, y Rodney Cromwell creo que espantó a parte de la gente (a mitad del concierto ya había unas calvas enormes entre el público), pero los que nos quedamos yo creo que estábamos casi todos babeando.
Y por la noche me perdí a los dos primeros, pero bueno... los de Witching Waves y The Spook School valió por un festival entero. Vaya dos bolacos.
La mayoría de las pinchadas que vi (que por desgracia no fueron tantas) me parecieron un poquito bajoneras. Eso sí, cuando marché el sábado para la cama estaba empezando Clara Sierra y aquello ya era fiestaza de la buena, temazo tras temazo. Si la cosa siguió en ese plan, seguro que el cierre fue apoteósico.
Por lo demás, como de costumbre es una gozada estar en un festival donde la mayor parte del público está volcada en disfrutar de la música, que todo está hecho con tanto cariño, que puedes echar una charla tranquilamente con cualquiera de cualquiera de los músicos...
Y mención aparte también para el kebab de al lado de la Taboo. Épico.
Abajo el trabajo