14-01-11, 01:50
Lo de los Dead Capo está bien, sano y bien intencionado, aunque algo impreciso.
1-Necesitamos que se redacte una nueva ley de propiedad intelectual porque la vigente he sido corrompida por completo a base de sobornos a los estamentos oficiales por parte de la INDUSTRIA.
2-Necesitamos un régimen fiscal adecuado a la peculiar corriente de ingresos, de los profesionales de la música. En Inglaterra hace mucho ya que los artistas declaran bloques de 5 años promediados.
3-se impone también la creación de un "sindicato", corporación, colegio, o lo que sea que solucione el problema de la representatividad, si no, nos encontramos con que se reúne con los políticos el servicio de inteligencia de ESTOPA.
4-La industria discográfica es tan cruel como lo puede ser la minera. Son los políticos los que tienen que limitar su capacidad de acción.
En este momento están en un punto en el que no necesitan nuevo repertorio, que les exigiría redactar nuevos contratos, limitando lógicamente sus márgenes, y por tanto prefieren explotar un material no posterior a los 90 en el que el gobierno les consiente vender sin tener que revisar acuerdos a pesar de que para ello usan el formato digital no previsto en los contratos a los que se acogen esas canciones.
Resultado: no les interesa ninguna canción nueva ni mía ni vuestra.
Consecuencia: la música se vulgariza, se degrada.
5-la relación recientemente creada entre TELEFÓNICAS y DISCOGRÁFICAS es algo que ha pillado a los gobiernos por sorpresa, es ahí donde se juegan los GRANDES CAPITALES yo ni se leer esas cifras. A los artistas no les pagan nada, pero a los usuarios les roban la cartera.
6-El enfrentamiento entre usuarios y artistas lo crearon ellos, haciendo parecer que éramos los artistas los beneficiados de semejante fraude. mientras la gente se preocupa de Ana Belen a ellos les dejan en paz, y hacen su agosto.
1-Necesitamos que se redacte una nueva ley de propiedad intelectual porque la vigente he sido corrompida por completo a base de sobornos a los estamentos oficiales por parte de la INDUSTRIA.
2-Necesitamos un régimen fiscal adecuado a la peculiar corriente de ingresos, de los profesionales de la música. En Inglaterra hace mucho ya que los artistas declaran bloques de 5 años promediados.
3-se impone también la creación de un "sindicato", corporación, colegio, o lo que sea que solucione el problema de la representatividad, si no, nos encontramos con que se reúne con los políticos el servicio de inteligencia de ESTOPA.
4-La industria discográfica es tan cruel como lo puede ser la minera. Son los políticos los que tienen que limitar su capacidad de acción.
En este momento están en un punto en el que no necesitan nuevo repertorio, que les exigiría redactar nuevos contratos, limitando lógicamente sus márgenes, y por tanto prefieren explotar un material no posterior a los 90 en el que el gobierno les consiente vender sin tener que revisar acuerdos a pesar de que para ello usan el formato digital no previsto en los contratos a los que se acogen esas canciones.
Resultado: no les interesa ninguna canción nueva ni mía ni vuestra.
Consecuencia: la música se vulgariza, se degrada.
5-la relación recientemente creada entre TELEFÓNICAS y DISCOGRÁFICAS es algo que ha pillado a los gobiernos por sorpresa, es ahí donde se juegan los GRANDES CAPITALES yo ni se leer esas cifras. A los artistas no les pagan nada, pero a los usuarios les roban la cartera.
6-El enfrentamiento entre usuarios y artistas lo crearon ellos, haciendo parecer que éramos los artistas los beneficiados de semejante fraude. mientras la gente se preocupa de Ana Belen a ellos les dejan en paz, y hacen su agosto.
"...I don´t care if the world is ended today
when I was not invited to it anyway..."
M.Manson.
when I was not invited to it anyway..."
M.Manson.