22-09-21, 09:55
Santiago Veguín Martín
6 min ·
Compartido con: Público
Parafraseando a Jorge “Ilegal” Martínez, parece ser que “el rock es una señal sonora y electrónica que induce a contagiarse de COVID”.
Si no es así, ciertas medidas no se entienden. Por ejemplo, esta noticia que leo del 18 de este mes… “El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha precisado que el decreto que relaja las restricciones en Euskadi permite bailar con mascarilla solo en las discotecas y en los locales de ocio nocturno, mientras que sigue sin ser posible en los conciertos, donde se mantiene que los asistentes tengan asignado un lugar en el que deben permanecer sentados. «Solo se puede bailar en las discotecas, en los conciertos no. La previsión es que en los conciertos las personas tengan un lugar asignado y estén sentados, no hay posibilidad de bailar», ha explicado”.
De todas las medidas pandémicas ridículas que he visto, puede que esta sea la más gorda y eso que el listón era alto. Así las cosas se pueden dar circunstancias realmente hilarantes como las que voy a exponer ahora, a modo de ejemplo bien gráfico… Se puede dar el caso, seguro que sucede si no está sucediendo ya, que por ejemplo, en el Kafé Antzokia de Bilbao den un concierto de… vamos a decir unos Cracker (se puede cambiar el nombre del grupo) y durante el mismo la gente tenga que estar sentada en sus mesas sin poder cantar, bailar, beber. (Esto en un concierto de rock es como echar un polvo escayolado de cuerpo entero, con un agujero en medio para la polla) La situación es tan ridícula como eso pero todavía no lo suficiente porque si una vez acabado el concierto, programas una pinchada de Johnny Hickman y David Lowery poniendo sus grandes éxitos, podrían fusilar el mismo set que acaban de tocar en directo, enlatado y ahora si, en ese mismo espacio, se retirarían las mesas y la gente podría darse al jolgorio. Es tan bochornoso que mientras lo escribo me sigo sorprendiendo. No doy crédito ¿Cómo cojones puede pasar esto?
Otro ejemplo exagerado, o no, que se puede dar. En esa misma sala dan comidas, o lo hacían (desconozco si sigue sucediendo). A las dos de la tarde puedes ir a comer, se convierte en un restaurante. Pues bien, si mientras comes y bebes pones ahí al fondo a los Cracker tocando, nadie te podría decir nada, pero si eso lo anuncias como un concierto y quitas las viandas de la mesa, entonces, ya no podrías beber tú vino o tú cerveza porque el COVID que no es lo suficientemente hijo puta para atraparte mientras comes si lo hace si pretendes beber en un concierto. ¿Me estoy perdiendo algo? ¿Hay alguna cámara oculta?
Coño, que en festivales de estos itinerantes, en los que la programación se sucede en diferentes puntos de la ciudad, (Purple Weekend, Ebroclub, y tantos y tantos…) tendríamos que ver los conciertos sentados pero por las noches las sesiones de Djs serían con gente bailando y bebiendo en las salas… Que no tiene ningún sentido le des las vueltas que le des. Que es un puto dislate.
En este punto, sin saber de leyes ni quererme meter en un jardín o en como organiza el trabajo el resto, yo creo que habría que denunciar la situación a la justicia. Ir con todo, no se me ocurre otro escenario en el que no se diera la razón a las promotoras, salas, etc. Es que no veo cómo cojones se puede seguir justificando este atropello. Están jugando con el pan de mucha gente, y de paso, con el alimento del alma de otros tantos. Y lo peor de todo, seguro que si ahora suben los contagios, la culpa la tendrán esos mismos conciertos, con aforo reducido, distancias, asientos, butacas, mesas, sin bebidas, que a pesar de todo, son el mismo diablo y propagan COVID que no veas. HASTA LA POLLA (Con mayúsculas y letras de oro)
6 min ·
Compartido con: Público
Parafraseando a Jorge “Ilegal” Martínez, parece ser que “el rock es una señal sonora y electrónica que induce a contagiarse de COVID”.
Si no es así, ciertas medidas no se entienden. Por ejemplo, esta noticia que leo del 18 de este mes… “El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha precisado que el decreto que relaja las restricciones en Euskadi permite bailar con mascarilla solo en las discotecas y en los locales de ocio nocturno, mientras que sigue sin ser posible en los conciertos, donde se mantiene que los asistentes tengan asignado un lugar en el que deben permanecer sentados. «Solo se puede bailar en las discotecas, en los conciertos no. La previsión es que en los conciertos las personas tengan un lugar asignado y estén sentados, no hay posibilidad de bailar», ha explicado”.
De todas las medidas pandémicas ridículas que he visto, puede que esta sea la más gorda y eso que el listón era alto. Así las cosas se pueden dar circunstancias realmente hilarantes como las que voy a exponer ahora, a modo de ejemplo bien gráfico… Se puede dar el caso, seguro que sucede si no está sucediendo ya, que por ejemplo, en el Kafé Antzokia de Bilbao den un concierto de… vamos a decir unos Cracker (se puede cambiar el nombre del grupo) y durante el mismo la gente tenga que estar sentada en sus mesas sin poder cantar, bailar, beber. (Esto en un concierto de rock es como echar un polvo escayolado de cuerpo entero, con un agujero en medio para la polla) La situación es tan ridícula como eso pero todavía no lo suficiente porque si una vez acabado el concierto, programas una pinchada de Johnny Hickman y David Lowery poniendo sus grandes éxitos, podrían fusilar el mismo set que acaban de tocar en directo, enlatado y ahora si, en ese mismo espacio, se retirarían las mesas y la gente podría darse al jolgorio. Es tan bochornoso que mientras lo escribo me sigo sorprendiendo. No doy crédito ¿Cómo cojones puede pasar esto?
Otro ejemplo exagerado, o no, que se puede dar. En esa misma sala dan comidas, o lo hacían (desconozco si sigue sucediendo). A las dos de la tarde puedes ir a comer, se convierte en un restaurante. Pues bien, si mientras comes y bebes pones ahí al fondo a los Cracker tocando, nadie te podría decir nada, pero si eso lo anuncias como un concierto y quitas las viandas de la mesa, entonces, ya no podrías beber tú vino o tú cerveza porque el COVID que no es lo suficientemente hijo puta para atraparte mientras comes si lo hace si pretendes beber en un concierto. ¿Me estoy perdiendo algo? ¿Hay alguna cámara oculta?
Coño, que en festivales de estos itinerantes, en los que la programación se sucede en diferentes puntos de la ciudad, (Purple Weekend, Ebroclub, y tantos y tantos…) tendríamos que ver los conciertos sentados pero por las noches las sesiones de Djs serían con gente bailando y bebiendo en las salas… Que no tiene ningún sentido le des las vueltas que le des. Que es un puto dislate.
En este punto, sin saber de leyes ni quererme meter en un jardín o en como organiza el trabajo el resto, yo creo que habría que denunciar la situación a la justicia. Ir con todo, no se me ocurre otro escenario en el que no se diera la razón a las promotoras, salas, etc. Es que no veo cómo cojones se puede seguir justificando este atropello. Están jugando con el pan de mucha gente, y de paso, con el alimento del alma de otros tantos. Y lo peor de todo, seguro que si ahora suben los contagios, la culpa la tendrán esos mismos conciertos, con aforo reducido, distancias, asientos, butacas, mesas, sin bebidas, que a pesar de todo, son el mismo diablo y propagan COVID que no veas. HASTA LA POLLA (Con mayúsculas y letras de oro)
"Stoner pincha mejor bajo presión" (Patrullero)