21-09-21, 14:43
Juan Santaner
30 min ·
Da miedo. Todo esto da miedo. Y rabia. ¿Qué diferencia hay entre un concierto y un Metro atestado de gente? Simplemente, la percepción de un político analfabeto, que nunca ha sabido de qué hablaba ni qué hacía. Llevamos año y medio, dieciocho meses, sin poder trabajar. Cuando todo el sector de la música hemos sido los primeros en asumir la situación y en tratar de solucionarla. Venga, va: reduzcamos aforos, cancelemos conciertos, cumplamos todas las normas… Ya nos recuperaremos. Ya nos ayudarán. Que nos jodan. Somos idiotas.
Hace unas semanas tuve un concierto en un festival. Bueno, y en unos cuantos más. Pero éste es especialmente hiriente.
Era en un pueblo de la Comunidad de Madrid. Mi amiga L. vive allí. Y quedé con ella para comer antes de la prueba de sonido de mi grupo.
En la Plaza Mayor del pueblo había mil chiringuitos y mil personas bailando a Mecano (casualidad, supongo) y más éxitos de los noventa. Estaban en fiestas, así que los altavoces (del Ayuntamiento) saturaban. En la plaza. A todo rabo. Los miembros de la Peña Abejorro (único dato concreto aquí, por dar algo de credibilidad al relato) bebían tranquilamente minis, muchos minis, y daiquiris, sin mascarilla, y hacían congas tranquilamente. Al día siguiente escuché que había habido cargas de la policía y tropecientos botellones. En esas fiestas del pueblo. Lógico. Era predecible.
Llegada la hora de la prueba, me fui al recinto. Exactamente a 500 metros de ese fiestón a plena luz del día.
La prueba de sonido, bien. Y pronto se abrieron las puertas del festival. Ganazas. Perfecto. Pero en el recinto no se podía beber. Ni una botella de agua. ¡Ni una botella de agua! ¿Por qué cojones se puede beber lo que se quiera y sin usar una sola mascarilla en la Plaza Mayor y no se puede beber agua y te echan una bronca si se te baja la mascarilla a unos pocos metros de distancia? Habiendo pagado una entrada. Cumpliendo todas las medidas. ¿Tiene algún sentido? ¿Y lo de que haya botellones de 25.000 personas y no se pueda ir a conciertos? Y no sigo con la lista de agravios comparativos, porque no acabo.
Empieza a ser insultante y, sobre todo, desesperante. Nos vamos a ir a la mierda miles de personas mientras los políticos hablan de libertad. Hemos sido engañados. ¿Por qué no convocamos directamente botellones y luego en realidad hacemos conciertos? Nadie dirá nada. Nadie hará nada. A lo mejor es la solución.
30 min ·
Da miedo. Todo esto da miedo. Y rabia. ¿Qué diferencia hay entre un concierto y un Metro atestado de gente? Simplemente, la percepción de un político analfabeto, que nunca ha sabido de qué hablaba ni qué hacía. Llevamos año y medio, dieciocho meses, sin poder trabajar. Cuando todo el sector de la música hemos sido los primeros en asumir la situación y en tratar de solucionarla. Venga, va: reduzcamos aforos, cancelemos conciertos, cumplamos todas las normas… Ya nos recuperaremos. Ya nos ayudarán. Que nos jodan. Somos idiotas.
Hace unas semanas tuve un concierto en un festival. Bueno, y en unos cuantos más. Pero éste es especialmente hiriente.
Era en un pueblo de la Comunidad de Madrid. Mi amiga L. vive allí. Y quedé con ella para comer antes de la prueba de sonido de mi grupo.
En la Plaza Mayor del pueblo había mil chiringuitos y mil personas bailando a Mecano (casualidad, supongo) y más éxitos de los noventa. Estaban en fiestas, así que los altavoces (del Ayuntamiento) saturaban. En la plaza. A todo rabo. Los miembros de la Peña Abejorro (único dato concreto aquí, por dar algo de credibilidad al relato) bebían tranquilamente minis, muchos minis, y daiquiris, sin mascarilla, y hacían congas tranquilamente. Al día siguiente escuché que había habido cargas de la policía y tropecientos botellones. En esas fiestas del pueblo. Lógico. Era predecible.
Llegada la hora de la prueba, me fui al recinto. Exactamente a 500 metros de ese fiestón a plena luz del día.
La prueba de sonido, bien. Y pronto se abrieron las puertas del festival. Ganazas. Perfecto. Pero en el recinto no se podía beber. Ni una botella de agua. ¡Ni una botella de agua! ¿Por qué cojones se puede beber lo que se quiera y sin usar una sola mascarilla en la Plaza Mayor y no se puede beber agua y te echan una bronca si se te baja la mascarilla a unos pocos metros de distancia? Habiendo pagado una entrada. Cumpliendo todas las medidas. ¿Tiene algún sentido? ¿Y lo de que haya botellones de 25.000 personas y no se pueda ir a conciertos? Y no sigo con la lista de agravios comparativos, porque no acabo.
Empieza a ser insultante y, sobre todo, desesperante. Nos vamos a ir a la mierda miles de personas mientras los políticos hablan de libertad. Hemos sido engañados. ¿Por qué no convocamos directamente botellones y luego en realidad hacemos conciertos? Nadie dirá nada. Nadie hará nada. A lo mejor es la solución.
"Stoner pincha mejor bajo presión" (Patrullero)