22-04-06, 12:49
El arte contemporáneo está llegando a nuestros WC, y me han llegado a causar serios problemas de identidad. La primera vez fue ya hace unos años en un bar que estaba en algún pueblo perdido por no sé dónde. Me entraron ganas de mear y se me olvidaron al instante cuando me quedé mirando las dos puertas, una con un cuadro de un sombrero, y la otra de un paraguas. Bien, ¿y yo qué soy?. El siguiente incidente le tuve en el bar La Viga. Después de dos o tres cervezas sucedió lo inevitable. Me levanté, y me quedé clavada en el suelo mirando a las dos puertas como si fuese un partido de tenis. A ver, ya está bien. Yo qué huevos soy, ¿perro o gato?. A ver, los gatos siempre han parecido más femeninos. Me meo. Pero resulta que yo ladro. Me lo estoy haciendo. Y los perros además son bien majos y bonitos. Cruzo las piernas. Perro o gato, gato o perro, me meo gato, perro me orino, gato, perro... Y por eso de mi tendencia al ladrido acabé metida (creo) en el baño de tios. Otro trauma lo he tenido en el Mc Donald’s del Alisal. Yo creo que son ganas de tocar las pelotas. No puedes ir al baño con prisas, eso ya se acabó. Ahora el dilema era todavía peor: ¿yo qué soy, un jugador de béisbol o un negro jugando al baloncesto?
En el Woodstock ya terminé de asumir mi crisis de identidad.
(que alguien me lo explique)
En el Woodstock ya terminé de asumir mi crisis de identidad.
(que alguien me lo explique)
Te dejaste las llaves dentro.