29-06-15, 15:55
Momentos brutales de la crónica de Stoner..(no, lo del Rexona no
)
(Black Mountain)
"..... Lo mismo no fue un concierto, fue un sueño, una alucinación, un chute de música espacial que me hizo levitar. (Cerrar los ojos y ver)
En Tyrants se podía cabalgar en cada embestida de guitarras para luego quedar flotando, como quién va de puntilla sobre las nubes, con la música acariciando las orejas. Luz y oscuridad, calma y tempestad. Los putos amos del ajedrez sonoro. Wucan me aísla del resto de miles… Solo puedo tocar mi bajo imaginario, mirar al suelo y dejar que los teclados se cuelen por mi cerebro y vayan subiendo como si tuviera una escalera de caracol en la cabeza. (Si, estas cosas que hace años habían conseguido Manta Ray con Cartografíes). Con Set us free siguen meciéndonos… Gotitas de blues, psicodelia, rock progresivo, todo provisto con una personalidad y unos desarrollos realmente interesantes....
Druganaut nos vuelve a hacer latir gracias a ese bajo de pulsión funky. Estoy como una moto, pasajes lisérgicos, desiertos y espejismos. La marmita del ácido colmada hasta arriba. Con No hits se derramaría por completo. La música me mantenía como una máquina de respiración artifial. Analgésicos por vena y dejarse llevar. Todo parecía tan real, las sensaciones se multiplicaban. ¡Qué profundidad! Estaba pegándome un viaje brutalísimo sin ninguna ayuda externa. Seguí escuchando a Amber Webber con su figura desmadejada dejando escapar esa voz como un hilo siempre apunto de romper (Me llevaba a Grace Slick cada dos por tres). Me dejaron colgado en un interludio que parecía el final del túnel, ví la luz, de hecho era una luz blanca, cegadora, solo la silueta negra de Amber me agarraba a la tierra, ahora ya eso era puro Dead Can Dance… volvieron aquellos jinetes del Apocalipsis a cabalgar con fuerza y la canción mutó de nuevo en torbellino. Me temblaban las canillas......
(ZZTop)
......La música de los tejanos es muy visual, era imposible escucharles sin ver la Chopper arrancando, el gasolinero con el peto vaquero manchado de grasa, el motel de carretera, los putis con luces de neón, las botellas de licor con pitorro, el barbero pasando la navaja al joven militar, el letrero de “Open” en la puerta de la cafetería, la tarta de cerezas, la Jukebox al fondo, las plantas rodadoras, el tío Tom limpiando la vieja escopeta mientras se balancea en la Rocking Chair, las tostadas quemadas saltando de la tostadora, la criada negra cantando blues de algodoneros mientras tiende la ropa al sol, el borracho expulsado por la puerta de atrás… el cartel de “Bienvenido a…” de hojalata marchita, el vecino pasando la cortacesped, el rey de la bolera, las partidas de Poker… Podría rellenar líneas y líneas.
Deseando el Sábado

(Black Mountain)
"..... Lo mismo no fue un concierto, fue un sueño, una alucinación, un chute de música espacial que me hizo levitar. (Cerrar los ojos y ver)
En Tyrants se podía cabalgar en cada embestida de guitarras para luego quedar flotando, como quién va de puntilla sobre las nubes, con la música acariciando las orejas. Luz y oscuridad, calma y tempestad. Los putos amos del ajedrez sonoro. Wucan me aísla del resto de miles… Solo puedo tocar mi bajo imaginario, mirar al suelo y dejar que los teclados se cuelen por mi cerebro y vayan subiendo como si tuviera una escalera de caracol en la cabeza. (Si, estas cosas que hace años habían conseguido Manta Ray con Cartografíes). Con Set us free siguen meciéndonos… Gotitas de blues, psicodelia, rock progresivo, todo provisto con una personalidad y unos desarrollos realmente interesantes....
Druganaut nos vuelve a hacer latir gracias a ese bajo de pulsión funky. Estoy como una moto, pasajes lisérgicos, desiertos y espejismos. La marmita del ácido colmada hasta arriba. Con No hits se derramaría por completo. La música me mantenía como una máquina de respiración artifial. Analgésicos por vena y dejarse llevar. Todo parecía tan real, las sensaciones se multiplicaban. ¡Qué profundidad! Estaba pegándome un viaje brutalísimo sin ninguna ayuda externa. Seguí escuchando a Amber Webber con su figura desmadejada dejando escapar esa voz como un hilo siempre apunto de romper (Me llevaba a Grace Slick cada dos por tres). Me dejaron colgado en un interludio que parecía el final del túnel, ví la luz, de hecho era una luz blanca, cegadora, solo la silueta negra de Amber me agarraba a la tierra, ahora ya eso era puro Dead Can Dance… volvieron aquellos jinetes del Apocalipsis a cabalgar con fuerza y la canción mutó de nuevo en torbellino. Me temblaban las canillas......
(ZZTop)
......La música de los tejanos es muy visual, era imposible escucharles sin ver la Chopper arrancando, el gasolinero con el peto vaquero manchado de grasa, el motel de carretera, los putis con luces de neón, las botellas de licor con pitorro, el barbero pasando la navaja al joven militar, el letrero de “Open” en la puerta de la cafetería, la tarta de cerezas, la Jukebox al fondo, las plantas rodadoras, el tío Tom limpiando la vieja escopeta mientras se balancea en la Rocking Chair, las tostadas quemadas saltando de la tostadora, la criada negra cantando blues de algodoneros mientras tiende la ropa al sol, el borracho expulsado por la puerta de atrás… el cartel de “Bienvenido a…” de hojalata marchita, el vecino pasando la cortacesped, el rey de la bolera, las partidas de Poker… Podría rellenar líneas y líneas.
Deseando el Sábado
