02-02-11, 11:55
Deer Tick
Escrito por Jordi Sánchez
Martes 01 de Febrero de 2011 00:00
Sidecar. Barcelona. 31/01/2011
Deer Tick debutaron ayer en Barcelona para presentar su excelente último disco en estudio titulado "The Black Dirt Sessions". Colas en Sidecar para entrar. Me entró el miedo pensando en una sala abarrotada que rozaba el sold out (un Sidecar petado es una pesadilla). Pero eran cosas de la organización; entrada muy lenta, mucho público pero se estaba bien. Salen las teloneras.
Lo siento, fue una tomadura de pelo por parte de Houston Party Records. Salen Deer Tick tardísimo, pasadas las 22:30 h. de un lunes! John McCauley (guitarra y voz y principal compositor de los Deer) tiene mucho talento y tablas y eso se nota desde el primer instante (la bebida no parece afectarle - su actitud por momentos me recordó a Ryan Adams en sus inicios, cuando tocó en Bikini hace muchos años-). Arrancan con «Choir of Angels» y la banda suena muy sólida, con un sonido excelente. No conozco todos los temas, pues sólo tengo su último disco pero sólo hago que disfrutar canciones en mayúsculas, melodías excelentes y pasajes guitarristicos de chuparse los dedos.Suenan conjuntados, delicados y cuando quieren, agresivos. La bebida y la berborrea entre tema y tema (innecesaria) ralentiza el evento, pero no le quita calidad a la propuesta. Hay mucho Arte detrás de estos tipos, y también actitud (siempre importante pues opino que siempre hay que creérselo en este negocio). Por ejemplo, Ian P. O'Neil, un joven talento que con su rítimica y algún que otro solo se pone a hacer coros o cantar rock and roll a lo sixtiees con una vena gritona que en determinados momentos de la noche me recordó al John Lennon de The Cavern (pone los pelos de punta); Rob B. Crowell al teclado y saxo aporta calor y atmósferas; Christopher D. Ryan (bajo) parece salido de secundaria, con un corte de pelo y look militar se dedica a seguir al resto. Por último, Dennis M. Ryan es un joven batería enorme con un look de oso y leñador que es un auténtico fenómeno de la naturaleza, con un sentido del ritmo y del espectáculo por igual. El momento álgido del concierto llegó con «Mange» (su mejor tema con épica final Stoniana) de más de diez minutos de duración. Terminaron con dos versiones arrolladoras, «Bring it On Home To Me» de Sam Cooke y el guiño final con una excelente «La Bamba» popularizada por Richie Valens. Quizás algún día cuando estén en boca de todos y sea imposible que toquen en un recinto tan pequeño, los que estuvimos ayer en Sidecar nos congratularemos de haberlos visto en ese formato y nos sentiremos privilegiados.
Jordi Sánchez
Escrito por Jordi Sánchez
Martes 01 de Febrero de 2011 00:00
Sidecar. Barcelona. 31/01/2011
Deer Tick debutaron ayer en Barcelona para presentar su excelente último disco en estudio titulado "The Black Dirt Sessions". Colas en Sidecar para entrar. Me entró el miedo pensando en una sala abarrotada que rozaba el sold out (un Sidecar petado es una pesadilla). Pero eran cosas de la organización; entrada muy lenta, mucho público pero se estaba bien. Salen las teloneras.
Lo siento, fue una tomadura de pelo por parte de Houston Party Records. Salen Deer Tick tardísimo, pasadas las 22:30 h. de un lunes! John McCauley (guitarra y voz y principal compositor de los Deer) tiene mucho talento y tablas y eso se nota desde el primer instante (la bebida no parece afectarle - su actitud por momentos me recordó a Ryan Adams en sus inicios, cuando tocó en Bikini hace muchos años-). Arrancan con «Choir of Angels» y la banda suena muy sólida, con un sonido excelente. No conozco todos los temas, pues sólo tengo su último disco pero sólo hago que disfrutar canciones en mayúsculas, melodías excelentes y pasajes guitarristicos de chuparse los dedos.Suenan conjuntados, delicados y cuando quieren, agresivos. La bebida y la berborrea entre tema y tema (innecesaria) ralentiza el evento, pero no le quita calidad a la propuesta. Hay mucho Arte detrás de estos tipos, y también actitud (siempre importante pues opino que siempre hay que creérselo en este negocio). Por ejemplo, Ian P. O'Neil, un joven talento que con su rítimica y algún que otro solo se pone a hacer coros o cantar rock and roll a lo sixtiees con una vena gritona que en determinados momentos de la noche me recordó al John Lennon de The Cavern (pone los pelos de punta); Rob B. Crowell al teclado y saxo aporta calor y atmósferas; Christopher D. Ryan (bajo) parece salido de secundaria, con un corte de pelo y look militar se dedica a seguir al resto. Por último, Dennis M. Ryan es un joven batería enorme con un look de oso y leñador que es un auténtico fenómeno de la naturaleza, con un sentido del ritmo y del espectáculo por igual. El momento álgido del concierto llegó con «Mange» (su mejor tema con épica final Stoniana) de más de diez minutos de duración. Terminaron con dos versiones arrolladoras, «Bring it On Home To Me» de Sam Cooke y el guiño final con una excelente «La Bamba» popularizada por Richie Valens. Quizás algún día cuando estén en boca de todos y sea imposible que toquen en un recinto tan pequeño, los que estuvimos ayer en Sidecar nos congratularemos de haberlos visto en ese formato y nos sentiremos privilegiados.
Jordi Sánchez
"Stoner pincha mejor bajo presión" (Patrullero)